Riohacha

Bienestar Familiar fortalece la justicia restaurativa con primera práctica formal en La Guajira

La Guajira
Riohacha

Bienestar Familiar Regional La Guajira, con el acompañamiento de la Subdirección de Responsabilidad Penal, realizó la primera práctica restaurativa formal con un joven vinculado a una medida no privativa de la libertad, con el propósito de restaurar los vínculos familiares y promover la reparación integral dentro de la sanción impuesta en el proceso del Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes (SRPA).

 

Esta iniciativa marca un hito en la región, al ser el primer ejercicio formal de justicia restaurativa desarrollado bajo la herramienta metodológica impulsada por Bienestar Familiar. Durante seis meses, el equipo psicosocial de CAIMEC, operador del programa, acompañó tanto al adolescente como a su familia —víctimas secundarias— en un proceso de reflexión, responsabilización y reconciliación, para reconstruir la confianza y fortalecer el entorno familiar.

 

 

«Este ejercicio es el resultado de un proceso de formación y fortalecimiento regional en prácticas restaurativas que adelantamos durante esta vigencia. Hoy podemos ver los frutos de un trabajo riguroso que busca dejar capacidad instalada en los operadores, para que continúen replicando este modelo con otros casos en el territorio», explicó Liz Cortés Medina, enlace técnico de la Subdirección de Responsabilidad Penal de Bienestar Familiar.

 

 

La práctica restaurativa desarrollada en La Guajira tuvo una preparación previa que incluyó acompañamiento psicosocial individual y familiar, sesiones periódicas de trabajo emocional y un proceso progresivo de responsabilización del adolescente frente a su conducta. 

 

 

Este cierre simbólico representa no solo la culminación de un proceso, sino también el inicio de una nueva etapa en la implementación de la justicia restaurativa dentro de Bienestar Familiar humanizada para los jóvenes en conflicto con la ley, fortaleciendo la atención integral.

 

 

Con esta iniciativa, el Instituto reafirma su compromiso con la transformación social, la prevención de la reincidencia y la reconstrucción del tejido familiar y comunitario, promoviendo que los adolescentes asuman de manera consciente las consecuencias de sus actos y participen en la reparación del daño causado.

 

(fin/scs/oam)

Actividades de Bienestar

Se resaltan avances en los procesos de adopción de Bienestar Familiar en La Guajira

La Guajira
Riohacha

•⁠  ⁠Entre 2020 y 2025, la entidad reportó la adopción de 15 niñas y niños oriundos del departamento de La Guajira, a distintas familias nacionales e internacionales.  

En el marco de la conmemoración del Día Mundial de la Adopción, Bienestar Familiar Regional La Guajira reafirma su compromiso con la protección y el bienestar de la niñez, destacando a las familias que han abierto su corazón y su hogar a niñas, niños y adolescentes que esperaban una segunda oportunidad para crecer en entornos llenos de amor y cuidado. 
 

 
De las 15 adopciones registradas, 8 correspondieron a procesos indeterminados (cuando se asigna a una familia, un niño, niña o adolescente indeterminado declarado en adoptabilidad), 5 de carácter nacional y 3 internacionales, con familias provenientes de España, Estados Unidos y Países Bajos; 7 fueron adopciones determinadas (cuando la familia ya tiene bajo su cuidado al niño, niña o adolescente con el cual tiene un vínculo de parentesco), nacionales, gestionadas directamente por la Regional La Guajira, lo que evidencia la importancia del trabajo territorial para lograr procesos más cercanos, ágiles y humanos.  
 

 
En cuanto a los rangos de edad, los niños y niñas adoptados mediante procesos indeterminados tenían entre 2 y 6 años, mientras que en las adopciones determinadas predominaron adolescentes de 8 a 17 años, quienes, cuentan con hogares que les brindan afecto, estabilidad y nuevas oportunidades. 
 

 
La entidad reitera que todas las adopciones en Colombia deben realizarse dentro del marco legal y con la intervención exclusiva de Bienestar Familiar, único organismo autorizado para adelantar y garantizar la idoneidad de los procesos. No se han identificado casos de adopciones por fuera del marco institucional, lo que asegura la protección integral de los derechos de los niños, niñas y adolescentes. 
 

 
Finalmente, Bienestar Familiar invita a las familias interesadas en brindar un hogar a un niño, niña o adolescente a acercarse a la sede regional en Riohacha (Calle 15 con Carrera 15 esquina) o consultar la información oficial en www.icbf.gov.co. De esta manera, se continúa construyendo un departamento donde cada niña y niño crezca protegido, amado y con oportunidades para soñar.
 

 
(fin/scs/oam)

Actividades de Bienestar

Niñez wiwa construye caminos de paz y esperanza junto al Bienestar Familiar en La Guajira

La Guajira
Riohacha

Con el propósito de fortalecer la convivencia y el bienestar emocional de las comunidades indígenas en proceso de retorno, el Bienestar Familiar desarrolló una jornada de acompañamiento psicosocial con la comunidad wiwa de Limón Carrizal, en la zona rural del distrito de Riohacha.

 

La actividad, liderada por las Unidades Móviles de Bienestar Familiar como parte del programa «Aquí Crece la Generación para la Paz», se enfocó en promover espacios de diálogo, reflexión y fortalecimiento cultural, contribuyendo a la construcción de entornos protectores y pacíficos de esta comunidad ancestral.

 

Durante la jornada, niñas, niños y adolescentes fueron protagonistas de actividades lúdicas y reflexivas orientadas a los símbolos de la paz. A través del juego y la expresión artística, compartieron mensajes de esperanza, amor por su entorno y compromiso con la preservación de la armonía en su comunidad.

 

El encuentro inició con una armonización espiritual en el sitio sagrado Duashagaka, donde los equipos profesionales de la entidad y la comunidad participaron en un acto simbólico de respeto y conexión con el territorio. Posteriormente, se llevó a cabo un diálogo con la autoridad tradicional wiwa, que permitió reafirmar el reconocimiento hacia su cosmovisión y prácticas culturales.

 

El cierre de la jornada incluyó un espacio de integración que fortaleció los lazos de confianza entre las familias y los equipos de Bienestar Familiar, dejando como resultado una mayor cohesión social, mejor convivencia y el sentido de pertenencia entre los participantes, promocionando la paz, la memoria cultural y el desarrollo integral de las comunidades indígenas en La Guajira. 

 

(fin/scs/aas)

Actividades de Bienestar

En La Guajira se fortalecen los entornos protectores para la niñez y la adolescencia a través de experiencias comunitarias Atrapasueños

La Guajira
Riohacha

Con el propósito de promover el reconocimiento y la protección integral de los derechos de niñas, niños y adolescentes, Bienestar Familiar desarrolla en los municipios de Fonseca y Dibulla las Experiencias Comunitarias Atrapasueños, que fomentan la participación, el buen uso del tiempo libre y la construcción de entornos protectores que contribuyen a la paz y al desarrollo social en el departamento de La Guajira.

 

Esta iniciativa beneficia actualmente a 1.642 niñas, niños y adolescentes, quienes participan en espacios formativos, lúdicos, artísticos y deportivos que fortalecen sus habilidades, vocaciones y talentos, al tiempo que promueven la convivencia pacífica, la identidad cultural y el bienestar emocional.

 

«Me ha gustado mucho la experiencia porque es una forma de distraerme en mi tiempo libre, aprendo cosas nuevas, comparto con personas nuevas y las actividades son muy bonitas», expresó Sibelys Deluque, una de las participantes de la estrategia en Fonseca.

 

Dentro de las acciones que impulsan las experiencias Atrapasueños se encuentran talleres artísticos y culturales, como danza tradicional, teatro comunitario, música y pintura; actividades deportivas y recreativas que incentivan el trabajo en equipo, el respeto y la disciplina; y jornadas ambientales, orientadas al cuidado del entorno, la siembra de árboles y la recuperación de espacios públicos.

 

Estas experiencias no solo permiten que las niñas, niños y adolescentes empleen su tiempo libre en actividades constructivas, sino que también fortalecen su autoestima, sus capacidades de liderazgo y su sentido de pertenencia con la comunidad. Además, contribuyen a prevenir vulneraciones de derechos, fomentar la salud mental, y crear ambientes seguros y libres de discriminación o violencia.

 

«Gracias por haber traído este maravilloso programa a nuestra comunidad. Es un programa que vino para nuestros niños y niñas, y de verdad están muy contentos. Es una forma de que se diviertan y aprendan las tradiciones de neustra comunidad que se estaban perdiendo», manifestó Avelino Solano, presidente de la Junta de Acción Comunal de la urbanización Villa Hermosa, en el municipio de Fonseca.

 

En La Guajira, 29 organizaciones comunitarias y sociales son aliadas de Bienestar Familiar en la implementación de estas experiencias, sumando esfuerzos para fortalecer los factores protectores en los entornos donde crecen niñas, niños y adolescentes. Atrapasueños para la Vida se consolida así como una herramienta transformadora que apuesta por la protección integral, la participación ciudadana y el desarrollo humano, impulsando el liderazgo y contribuyendo a la construcción de territorios de paz y bienestar en La Guajira.

 

(fin/scs/aas)

Actividades de Bienestar

Atunkawaa en Uribia: escuchar respetuosamente al pueblo wayuu para comprender las causas de la desnutrición

Riohacha
Uribia

Durante tres días, la Comisión Asesora Científica para La Guajira, como instancia del Sistema Nacional de Bienestar Familiar, realizó un Atunkawaa en Uribia, como parte de la implementación de las metodologías participativas para el estudio de las causas estructurales de la desnutrición infantil. La Comisión escuchó la palabra de más de 30 líderes, lideresas y autoridades tradicionales wayuu provenientes de distintos territorios de La Guajira: Jarara, Macuira, Maicao, apalanchiis de Uribia, Manaure y Riohacha, entre otros. 

 

En primer lugar, se llevó a cabo una armonización espiritual guiada por una Ouutsu, símbolo del saber ancestral femenino. El diálogo incluyó espacios alrededor del fogón, reconociendo las lógicas y reglas propias del pueblo wayuu para conversar y compartir la palabra. Se reflexionó sobre términos tradicionales relacionados con la desnutrición como Ajapüü, Mali’waa o Meisalaa, que expresan desequilibrios y rupturas en los vínculos de cuidado colectivo. 

 

 

Las autoridades destacaron que, para el pueblo wayuu, la desnutrición no es solo una falta de alimento, sino una consecuencia de la pérdida de equilibrio y del debilitamiento de las redes familiares. Durante el Atunkawaa los participantes elaboraron mapas sociocomunitarios y diagramas de parentesco, identificando cómo los conflictos territoriales inciden en la nutrición infantil. 

 

 

También se discutieron categorías como «comunidad», según algunas autoridades participantes. Esta palabra ha sido impuesta para «contabilizarlos» desde lógicas estatales que desconocen la estructura social wayuu, la cual está basada en Eiurruküs (linajes). Esta acción de «cuantificar con daño» ha generado tensiones internas y ha afectado las decisiones sobre el cuidado de la infancia. 

 

 

Se resaltó además el rol de las mujeres y jóvenes en la transmisión de la palabra y el tejido comunitario. Se discutió la noción de «autoridad»: sus diversos matices y transformaciones frente a una creciente influencia externa (alijuna) que debilita valores propios. Se discutió qué es la desnutrición desde la perspectiva wayuu, encontrándose tensiones entre la forma en que los programas asistencialistas a lo largo de las últimas décadas han propiciado una naturalización del hambre, debilitando la agencia y la autonomía alimentaria del pueblo wayuu. 

 

 

La Comisión Asesora Científica reafirma que no es posible plantear soluciones para superar la crisis de desnutrición sin un reconocimiento y comprensión profunda de las «redes de parentesco» del pueblo wayuu, ya que hay una diversidad de actores responsables de los niños y niñas con desnutrición: identificar las redes de parentesco es clave para fortalecer el cuidado de la infancia. 

 

 

Este Atunkawaa que se realizó en wayunaiqui, siguiendo las nociones propias del pueblo wayuu, y no a partir de metodologías foráneas, constituye un hito en el estudio de las causas estructurales de la desnutrición en el territorio.

 

 

(fin/scs/oam)

Actividades de Bienestar

Consultiva Afrodescendiente brinda su aporte al estudio de las causas estructurales de la desnutrición en La Guajira

Riohacha

La Comisión Asesora Científica de La Guajira, como instancia del Sistema Nacional de Bienestar Familiar, profundizó en la investigación sobre las causas estructurales de la desnutrición infantil mediante la realización de un foro participativo junto a la Consultiva Afrodescendiente Departamental y el Banco de Alimentos de la Diócesis de Riohacha.

Durante el encuentro se abordaron las dinámicas alimentarias propias de los pueblos afroguajiros, sus vínculos históricos y culturales con el territorio wayuu, así como las complejidades derivadas de la escasez de recursos esenciales, como el acceso al agua potable. 
 
«Los paraguachoneros estamos condenados al agua del carrotanque y de la lluvia», expresó una lideresa afro, evidenciando el déficit estructural en servicios básicos que incide directamente en la salud y la nutrición de la población. 
 
El evento identificó factores estructurales que profundizan la situación nutricional, tales como la pobreza, la desarticulación institucional, la exclusión histórica de las comunidades afrodescendientes en las políticas públicas y las tensiones interétnicas. Los participantes coincidieron en la urgencia de ampliar el enfoque étnico en los programas institucionales, reconociendo a las comunidades afro como actores territoriales que comparten prácticas, desafíos y trayectorias históricas en el departamento. 
 
Durante el espacio, el Banco de Alimentos de la Diócesis de Riohacha presentó su labor en el territorio, destacando su papel como puente solidario entre quienes desean ayudar y las comunidades que enfrentan inseguridad alimentaria. Explicaron que, mediante la recolección, clasificación y distribución de alimentos donados por empresas, instituciones y personas, logran brindar apoyo a poblaciones en situación de vulnerabilidad. 
 
Este encuentro representa un aporte significativo a la investigación liderada por la primera comisión en Colombia con participación de subcomisiones afrodescendientes y wayuu, enraizadas en el territorio. Juntas, analizan de manera

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conjunta y participativa las múltiples dimensiones de las causas estructurales de la desnutrición infantil en La Guajira. 
 

 
(fin/scs/oam)

Actividades de Bienestar

Familias wayuu del Esperanza en Uribia recibieron protección y nutrición por parte de Bienestar Familiar

Riohacha

Familias pertenecientes a la comunidad wayuu del asentamiento Sector Esperanza, en el municipio de Uribia, La Guajira, recibieron atención en protección y nutrición por parte de Bienestar Familiar, en el marco de la misión médica y humanitaria «Unidos por la Salud de Uribia». Durante la jornada, se brindaron valoraciones nutricionales, entrega de alimentos con alto valor nutricional (Bienestarina Más Nuestra), activación de rutas para la protección de derechos e intervención de la Defensoría de Familia.

En este asentamiento habitan más de 2.000 personas de la etnia wayuu, muchas de las cuales enfrentan serias dificultades para acceder a derechos fundamentales debido a las condiciones del territorio. En esta oportunidad, Bienestar Familiar focalizó su atención en niñas, niños y madres gestantes en situación de vulnerabilidad, con el propósito de contribuir a la prevención de la desnutrición y garantizar el bienestar integral. 

 

 

De manera articulada se trabajó con el sector salud, en la identificación de posibles casos de riesgo y activación de rutas de atención para generar respuestas oportunas y efectivas, en defensa del derecho a la salud y la vida de la niñez.

 

 

May Belliny Badillo Brito, directora regional encargada de Bienestar Familiar en La Guajira, reiteró el compromiso de la entidad con las comunidades más vulnerables del departamento e hizo un llamado a la corresponsabilidad ciudadana: «Si conocen casos de niñas o niños en riesgo de desnutrición, por favor comuníquense a la línea de WhatsApp 317 436 7714. Un mensaje puede salvar una vida».

 

 

La jornada, orientada al fortalecimiento del acceso a derechos fundamentales contó con articulación del Sistema Nacional de Bienestar Familiar, fue liderada por la Secretaría de Salud Departamental y también participaron la Fundación Ancla Colombia, la Fuerza Aeroespacial Colombiana, el Ejército Nacional y otros aliados estratégicos.

 

 

Actividades de Bienestar

«Que los padres orienten a sus hijos sobre los métodos anticonceptivos no debe ser un tabú»: Jonaithy Llorente, en foro conmemorativo de la Semana Andina

Riohacha

Con un contundente llamado a romper los tabúes en torno a la educación sexual, la adolescente Jonaithy Llorente, de 14 años, instó a madres y padres a orientar abiertamente a sus hijos sobre los métodos anticonceptivos. Su intervención se dio en el marco del foro «Fortaleciendo proyectos de vida y entornos seguros para niñas, niños, adolescentes y jóvenes de La Guajira», realizado por Bienestar Familiar en conmemoración de la Semana Andina de la Prevención del Embarazo en la Adolescencia y el Día Internacional de la Lucha contra la Explotación Sexual Comercial de Niñas, Niños y Adolescentes.

«A los padres les digo que le den más orientación a sus hijos, que les expliquen qué son los métodos anticonceptivos, que no debe ser un tabú», afirmó Jonaithy, destacando la importancia del conocimiento para evitar riesgos, abusos o embarazos por desconocimiento.

 

 

Jonaithy Llorente, como parte de los Jóvenes Unidos Contra La Explotación Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescentes (EICYAC); Constanza Radillo, Jasay Hernández y Dariana Acosta, fueron las panelistas en la primera parte del foro.

 

 

Las adolescentes abordaron temas críticos como la falta de orientación sexual en los hogares, el impacto del abuso y la violencia sexual, así como el rechazo a las uniones tempranas. Las jóvenes subrayaron que muchos embarazos a temprana edad y situaciones de explotación sexual tienen su raíz en la desinformación y la normalización de prácticas que vulneran sus derechos.

 

 

En un segundo momento del evento, lideresas comunitarias como Rosandry González, Daniela Sáenz, Leonela Bouriyú y Lianeth Castellano compartieron sus experiencias sobre la construcción de redes de protección comunitaria en La Guajira. Las panelistas reflexionaron sobre los factores de riesgo latentes en los territorios, especialmente aquellos que propician la explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes.

 

 

Durante el evento, la directora regional encargada de Bienestar Familiar La Guajira, May Belliny Badillo Brito, destacó el papel colectivo en la protección integral de la niñez: «La protección de la niñez y la adolescencia no puede depender de una sola institución: es tarea de todas y todos, del Estado, de las familias, de la comunidad y, por supuesto, de los propios jóvenes, quienes deben ser vistos no solo como beneficiarios, sino como agentes de cambio», expresó.

 

 

El foro fue posible gracias a la articulación del Sistema Nacional de Bienestar Familiar con entidades aliadas como las secretarías de Salud departamental y distrital, la Fundación Renacer y Save the Children, quienes aportaron al desarrollo de espacios pedagógicos, reflexivos y comunitarios para seguir avanzando en la prevención del embarazo en la adolescencia y la erradicación de la explotación sexual infantil en la región.

 

(fin/scs/oam)

Actividades de Bienestar

Mesa de trabajo fortaleció articulación entre Bienestar Familiar y el sector Salud para combatir la desnutrición en La Guajira

Riohacha

En un esfuerzo conjunto para fortalecer la atención y prevención de la desnutrición infantil en el departamento de La Guajira, 21 entidades prestadoras de servicios de salud, junto a la Dirección Regional, han consolidado una red de colaboración más estrecha, con el objetivo de mejorar la notificación y el seguimiento más efectivo y oportuno a niñas y niños en riesgo de desnutrición.

El encuentro contó con la participación de la directora regional encargada de Bienestar Familiar en La Guajira, May Belliny Badillo Brito, junto con coordinadores de los centros zonales, nutricionistas, el Ministerio de Salud y Protección Social, la Superintendencia Nacional de Salud, la Secretaría de Salud Departamental y entidades prestadoras del servicio de salud, Juntos definieron acuerdos y medidas puntuales para optimizar la identificación, la activación de rutas y la atención temprana de los casos en riesgo.

 

También se acordó fortalecer el uso de los canales de comunicación territorializados entre todas las entidades involucradas, con el fin de garantizar la fluidez de la información y la rápida respuesta a las situaciones que requieran intervención inmediata.

 

La desnutrición infantil sigue siendo un reto importante en La Guajira, y la unión de esfuerzos entre Bienestar Familiar, las entidades de salud y las autoridades locales, demuestra el compromiso del Gobierno de Gustavo Petro en la lucha por garantizar el bienestar y un futuro más saludable para niñas y niños en el territorio. 

 

Con dignidad, cumplimos.

 

Actividades de Bienestar

Comisión Asesora Científica sesionó con coadyuvantes de la Sentencia T 302 de 2017 y autoridades wayuu de la Zona Norte Extrema y Gobierno Propio

Riohacha

Como parte de su compromiso de avanzar en el diálogo con las comunidades, la Comisión Asesora Científica de La Guajira, como instancia del Sistema Nacional de Bienestar Familiar, encargada del estudio de las causas estructurales de la desnutrición, llevó a cabo una sesión con líderes locales en Riohacha. La jornada propició un intercambio abierto entre comisionados y autoridades wayuu de la Zona Norte Extrema y de Gobierno Propio, fortaleciendo la investigación en curso al incluir saberes y experiencias territoriales.

 

 

 

 

 

El encuentro permitió reconocer el rol de los líderes indígenas en la superación de la crisis por desnutrición y reflexionar sobre la historia que dio lugar a la Sentencia T-302 de 2017. Estos líderes expusieron visiones propias sobre la crisis humanitaria que atraviesa el pueblo wayuu, resaltando la corresponsabilidad de las autoridades y la soberanía alimentaria e informativa como ejes fundamentales para avanzar hacia soluciones sostenibles.

 

En la sesión, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) también presentó los resultados del Registro Multidimensional Wayuu, obtenido a partir de datos en cuatro municipios de La Guajira. Este instrumento ofrece información esencial que será analizada por la Comisión para orientar acciones diferenciadas según las realidades de cada territorio.

 

De igual manera, el Instituto Nacional de Salud (INS) socializó avances de una investigación orientada a diseñar un complemento nutricional para La Guajira, a partir de materias primas locales que fortalezcan la autonomía alimentaria de la zona. 

 

Finalmente, la Comisión acordó una metodología colaborativa para la redacción del informe final, que recogerá la pluralidad de voces y hallazgos. Este documento marcará un hito en la construcción de recomendaciones integrales para enfrentar de manera estructural la desnutrición infantil en La Guajira.

 

(fin/scs/oam)

Actividades de Bienestar