Con el fin de garantizar la salud y el bienestar de la niñez colombiana, el Gobierno Nacional anunció que los niños, niñas y adolescentes, entre los 6 y los 17 años, podrán salir al espacio público durante media hora, tres veces a la semana.
Para hacerlo, tanto los niños como el cuidador que los acompañe (quien no deberá ser mayor de 60 años) tendrán que adoptar todas las medidas de bioseguridad, entre ellas, el uso de tapabocas y de gel antibacterial o alcohol y el distanciamiento social de, al menos, dos metros de distancia frente a otras personas que se encuentren en la calle.
Además, no está permitido el uso de los juegos mecánicos de los parques como columpios, rodaderos, pasamanos, entre otros, ya que sus superficies pueden tener algún riesgo de contaminación. Tampoco se deben usar balones, bicicletas, patinetas o patines.
Así las cosas, como madre, padre o cuidador es posible que te estés preguntando ¿cómo logro que mi niño, niña o adolescente disfrute la salida al exterior? ¿Qué opciones tengo para entretenerlo durante esa media hora permitida?
Pues bien, desde el ICBF queremos dejarles algunas ideas para gozar ese tiempo al aire libre y lograr hacer de cada minuto una experiencia magnífica.
Para iniciar, lo primero que debes hacer es preguntarle a tu niña, niño o adolescente si quiere salir. Si la respuesta es positiva, deberás indagar qué le gustaría hacer. De esta manera, podrás generar una negociación sobre las posibles actividades y evitarás que el niño, niña o adolescente se haga falsas expectativas.
Opciones para divertirse en media hora
Las siguientes son algunas dinámicas que le puedes proponer a tus niños y adolescentes dependiendo de su edad. Puedes combinar las actividades recordando siempre que, al final, ellos son quienes deben elegir a qué quieren jugar.
Para niños de 6 a 12 años
1. Golosa, Rayuela o ‘pata coja’
Lleva contigo una tiza y al llegar al parque dibuja una golosa sobre el pavimento. Anima a tu niño o niña a avanzar saltando entre las casillas, en un solo pie y sin tocar las líneas. Si es posible, hazlo tú también y establezcan penitencias para aquel que se equivoque como por ejemplo, hacer un ocho con la cola, etc.
2. La gallina ciega
Elige un espacio libre donde el piso sea plano y no haya objetos o elementos con los que se puedan tropezar o huecos que puedan generar accidentes.
Usa un pañuelo para cubrir los ojos del niño o la niña. Una vez cubiertos, dale algunas vueltas a su cuerpo en círculos para generar un poco de desorientación. Luego, él o ella deberá atraparte siguiendo tu voz y estirando sus brazos.
Procura permanecer muy cerca a medida que se mueve pero no te dejes alcanzar. Tan pronto como te toque con sus manos, habrás perdido y deberán reiniciar el juego.
3. Globos en el aire
Consigue un globo, ínflalo y jueguen a lanzárselo entre sí. El objetivo es no dejarlo caer por ningún motivo.
Pueden lanzarlo con las manos, las piernas, los pies o la cabeza con tal de que este no toque el suelo. Al terminar la actividad, te recomendamos pincharlo y arrojarlo a una caneca de basura antes de volver a casa.
4. Arma tu propia carrera de obstáculos
Tú y tu niño o niña pueden armar su propia carrera de obstáculos al aire libre. Solo necesitan observar detalladamente el espacio en el que disfrutarán la sesión. Para empezar, definan un punto de partida y luego, los obstáculos y retos que deberán lograr.
Por ejemplo, pueden iniciar saltando en un solo pie hasta determinado punto, después avanzar haciendo sentadillas hasta llegar a otro lado; acto seguido, correr haciendo un círculo alrededor de los árboles o plantas; y luego, caminar hacia atrás otra distancia para terminar dando grandes saltos.
Si hay escalones o troncos, ese puede ser otro obstáculo, pues deberán subirlos y bajarlos el número de veces que ustedes mismos definan.
La idea, es aprovechar cada rincón del espacio público elegido y convertirlo, a punta de creatividad, en una zona de juegos.
5. Carrera de tres patas
Para este juego necesitarás llevar una pequeña cuerda suave, un pañuelo o una tira de tela. Arma parejas, tú con tu niña o niño, o entre hermanos, de modo que uno quede a lado del otro. Las piernas de cada miembro de la pareja que quedan juntas serán atadas con la cuerda, el pañuelo o la tira de tela. El juego consiste en correr hacia la línea de meta, coordinándose lo mejor posible, para no perder el equilibrio.
6. Exploradores del espacio
Antes de salir de casa hagan un listado en una hoja de papel de las posibles cosas que se encuentran afuera. Por ejemplo, una flor de color rojo, una roca, una caneca de basura, un carro azul, un perro, una puerta verde, un árbol gigante, una fuente de agua, etc.
La idea es convertirse en exploradores y buscar en el recorrido todo lo apuntado en la lista. Quien identifique primero el objeto deberá poner la inicial de su nombre en el papel. Gana quien más objetos logre descubrir.
6. Figuras de algodón
Esta es una opción para recuperar la calma y finalizar la sesión de actividad física al aire libre o para niños y niñas que no desean hacer mucho movimiento.
Siéntense en una silla o en el pasto y miren al cielo. Usen toda su creatividad e imaginación e intenten descubrir las figuras que forman las nubes.
A su vez, anímense a disfrutar de los sonidos y sensaciones del ambiente: el trino de los pájaros, el sonido del agua, el latido de los perros, la sensación del viento en las mejillas, el calor del sol, etc.
Para adolescentes de 13 a 17 años
Aunque los adolescentes también pueden disfrutar de una gran mayoría de las anteriores propuestas, te compartimos otras opciones con las que los puedes motivar.
1. Trotar o correr
Esta actividad es excelente para activar el sistema cardiovascular tanto de jóvenes como de adultos. Ustedes pueden elegir la velocidad y la intensidad con la que quieren hacerlo.
En caso de que el cuidador no pueda o no quiera participar, podrá involucrarse tomando el tiempo o contando el número de vueltas dadas. Lo ideal es iniciar con una práctica suave e ir incrementando el ritmo a medida que avanzan los días.
2. Actividad física
Tomen su celular y busquen en internet una rutina de ejercicios o de yoga para desarrollar al aire libre. No olviden hacer calentamiento y realizar estiramientos antes y después de cada práctica.
3. Caminar
Parece simple pero, a veces, todo lo que quieren los niños y adolescentes, es salir a dar una vuelta, caminar y respirar aire puro. Aprovecha el recorrido para conectarte con ellos y conocerlos.
Puedes motivar una conversación alrededor de la serie de tv que están viendo, el videojuego de moda, el libro que están leyendo, etc., algo sobre lo que ellos quieran hablar.
¡No olvides!
-Niños, niñas, adolescentes y adultos deben hidratarse antes de salir y al regresar a casa.
-Recuerden aplicar protector solar y usar gorra para proteger la piel de los rayos ultravioleta.
-Usen ropa y zapatos cómodos. Recuerda cambiar las prendas al regresar a casa, echarlas a lavar y tomar un baño. Las suelas de los zapatos deben ser desinfectadas con alcohol al regresar.
-Antes de salir y al volver a casa, lávense las manos con agua y jabón.
Para hacerlo, tanto los niños como el cuidador que los acompañe (quien no deberá ser mayor de 60 años) tendrán que adoptar todas las medidas de bioseguridad, entre ellas, el uso de tapabocas y de gel antibacterial o alcohol y el distanciamiento social de, al menos, dos metros de distancia frente a otras personas que se encuentren en la calle.
Además, no está permitido el uso de los juegos mecánicos de los parques como columpios, rodaderos, pasamanos, entre otros, ya que sus superficies pueden tener algún riesgo de contaminación. Tampoco se deben usar balones, bicicletas, patinetas o patines.
Así las cosas, como madre, padre o cuidador es posible que te estés preguntando ¿cómo logro que mi niño, niña o adolescente disfrute la salida al exterior? ¿Qué opciones tengo para entretenerlo durante esa media hora permitida?
Pues bien, desde el ICBF queremos dejarles algunas ideas para gozar ese tiempo al aire libre y lograr hacer de cada minuto una experiencia magnífica.
Para iniciar, lo primero que debes hacer es preguntarle a tu niña, niño o adolescente si quiere salir. Si la respuesta es positiva, deberás indagar qué le gustaría hacer. De esta manera, podrás generar una negociación sobre las posibles actividades y evitarás que el niño, niña o adolescente se haga falsas expectativas.
Opciones para divertirse en media hora
Las siguientes son algunas dinámicas que le puedes proponer a tus niños y adolescentes dependiendo de su edad. Puedes combinar las actividades recordando siempre que, al final, ellos son quienes deben elegir a qué quieren jugar.
Para niños de 6 a 12 años
1. Golosa, Rayuela o ‘pata coja’
Lleva contigo una tiza y al llegar al parque dibuja una golosa sobre el pavimento. Anima a tu niño o niña a avanzar saltando entre las casillas, en un solo pie y sin tocar las líneas. Si es posible, hazlo tú también y establezcan penitencias para aquel que se equivoque como por ejemplo, hacer un ocho con la cola, etc.
2. La gallina ciega
Elige un espacio libre donde el piso sea plano y no haya objetos o elementos con los que se puedan tropezar o huecos que puedan generar accidentes.
Usa un pañuelo para cubrir los ojos del niño o la niña. Una vez cubiertos, dale algunas vueltas a su cuerpo en círculos para generar un poco de desorientación. Luego, él o ella deberá atraparte siguiendo tu voz y estirando sus brazos.
Procura permanecer muy cerca a medida que se mueve pero no te dejes alcanzar. Tan pronto como te toque con sus manos, habrás perdido y deberán reiniciar el juego.
3. Globos en el aire
Consigue un globo, ínflalo y jueguen a lanzárselo entre sí. El objetivo es no dejarlo caer por ningún motivo.
Pueden lanzarlo con las manos, las piernas, los pies o la cabeza con tal de que este no toque el suelo. Al terminar la actividad, te recomendamos pincharlo y arrojarlo a una caneca de basura antes de volver a casa.
4. Arma tu propia carrera de obstáculos
Tú y tu niño o niña pueden armar su propia carrera de obstáculos al aire libre. Solo necesitan observar detalladamente el espacio en el que disfrutarán la sesión. Para empezar, definan un punto de partida y luego, los obstáculos y retos que deberán lograr.
Por ejemplo, pueden iniciar saltando en un solo pie hasta determinado punto, después avanzar haciendo sentadillas hasta llegar a otro lado; acto seguido, correr haciendo un círculo alrededor de los árboles o plantas; y luego, caminar hacia atrás otra distancia para terminar dando grandes saltos.
Si hay escalones o troncos, ese puede ser otro obstáculo, pues deberán subirlos y bajarlos el número de veces que ustedes mismos definan.
La idea, es aprovechar cada rincón del espacio público elegido y convertirlo, a punta de creatividad, en una zona de juegos.
5. Carrera de tres patas
Para este juego necesitarás llevar una pequeña cuerda suave, un pañuelo o una tira de tela. Arma parejas, tú con tu niña o niño, o entre hermanos, de modo que uno quede a lado del otro. Las piernas de cada miembro de la pareja que quedan juntas serán atadas con la cuerda, el pañuelo o la tira de tela. El juego consiste en correr hacia la línea de meta, coordinándose lo mejor posible, para no perder el equilibrio.
6. Exploradores del espacio
Antes de salir de casa hagan un listado en una hoja de papel de las posibles cosas que se encuentran afuera. Por ejemplo, una flor de color rojo, una roca, una caneca de basura, un carro azul, un perro, una puerta verde, un árbol gigante, una fuente de agua, etc.
La idea es convertirse en exploradores y buscar en el recorrido todo lo apuntado en la lista. Quien identifique primero el objeto deberá poner la inicial de su nombre en el papel. Gana quien más objetos logre descubrir.
6. Figuras de algodón
Esta es una opción para recuperar la calma y finalizar la sesión de actividad física al aire libre o para niños y niñas que no desean hacer mucho movimiento.
Siéntense en una silla o en el pasto y miren al cielo. Usen toda su creatividad e imaginación e intenten descubrir las figuras que forman las nubes.
A su vez, anímense a disfrutar de los sonidos y sensaciones del ambiente: el trino de los pájaros, el sonido del agua, el latido de los perros, la sensación del viento en las mejillas, el calor del sol, etc.
Para adolescentes de 13 a 17 años
Aunque los adolescentes también pueden disfrutar de una gran mayoría de las anteriores propuestas, te compartimos otras opciones con las que los puedes motivar.
1. Trotar o correr
Esta actividad es excelente para activar el sistema cardiovascular tanto de jóvenes como de adultos. Ustedes pueden elegir la velocidad y la intensidad con la que quieren hacerlo.
En caso de que el cuidador no pueda o no quiera participar, podrá involucrarse tomando el tiempo o contando el número de vueltas dadas. Lo ideal es iniciar con una práctica suave e ir incrementando el ritmo a medida que avanzan los días.
2. Actividad física
Tomen su celular y busquen en internet una rutina de ejercicios o de yoga para desarrollar al aire libre. No olviden hacer calentamiento y realizar estiramientos antes y después de cada práctica.
3. Caminar
Parece simple pero, a veces, todo lo que quieren los niños y adolescentes, es salir a dar una vuelta, caminar y respirar aire puro. Aprovecha el recorrido para conectarte con ellos y conocerlos.
Puedes motivar una conversación alrededor de la serie de tv que están viendo, el videojuego de moda, el libro que están leyendo, etc., algo sobre lo que ellos quieran hablar.
¡No olvides!
-Niños, niñas, adolescentes y adultos deben hidratarse antes de salir y al regresar a casa.
-Recuerden aplicar protector solar y usar gorra para proteger la piel de los rayos ultravioleta.
-Usen ropa y zapatos cómodos. Recuerda cambiar las prendas al regresar a casa, echarlas a lavar y tomar un baño. Las suelas de los zapatos deben ser desinfectadas con alcohol al regresar.
-Antes de salir y al volver a casa, lávense las manos con agua y jabón.



















