Los niños, niñas y adolescentes en Colombia viven en un universo de diversidad étnica. Por esta razón, debemos aprovechar estos tiempos para fortalecer, resaltar y revitalizar nuestras prácticas, nuestra cosmovisión y nuestras creencias.
Esto nos permite reencontrarnos con la memoria de nuestros ancestros, imaginarnos nuevas posibilidades de la existencia, afianzar el sentido de identidad y la sostenibilidad del planeta.
- Conectarnos con lo propio significa enriquecer el diálogo familiar. Es revivir los espacios en torno al fogón, la hamaca, el hogar, para contar las historias que fundamentan la cosmovisión de nuestros pueblos, nuestras comunidades y nuestras kumpanias.
Esto nos permite reencontrarnos con la memoria de nuestros ancestros, imaginarnos nuevas posibilidades de la existencia, afianzar el sentido de identidad y la sostenibilidad del planeta.
- Este tiempo es propicio para aprender desde lo propio y lo ancestral. Nos motiva a fortalecer los relatos de transmisión oral como forma de memoria colectiva con aquellos saberes que se transmiten, de generación en generación, a través de la palabra al lado del fogón o del fuego escuchando a los tíos y tías, a los abuelos y a los mayores aprendiendo de ellos y preguntándoles sobre sus experiencias, inquietudes y sueños.
- En este momento, actuar desde lo propio, significa reencontrarnos con la naturaleza, permanecer en nuestros hogares y territorios, para conectarnos con los elementos que nos brindan protección, sanación, cuidado y prevención.
- Hoy más que nunca, es esencial escuchar las voces de nuestras autoridades políticas y espirituales indígenas (caciques, curacas, jaibanás, gobernadores, etc.), las autoridades de los Consejos Comunitarios y las autoridades de las Kumpanyas, prestando especial atención a sus conocimientos respecto al cuidado y protección de nuestros niños y niñas.
- Debemos procurar trabajar de la mano con dichas autoridades políticas y espirituales indígenas para socializar las medidas que se están tomando ante la situación presentada por la COVID-19 y que pueden afectar niñas, niños y adolescentes.
- Asimismo, cuidarnos desde lo propio implica el correcto lavado de manos, fomentar las prácticas de autocuidado e higiene, cuidar el territorio, y ejercer la autonomía territorial desde el acompañamiento de las autoridades. En comunidad y familia seguro nos cuidaremos, y evitaremos los riesgos de posible contagio.
- Nuestras instituciones informarán y apoyarán permanentemente la difusión de información oficial, especialmente la que busque la protección y el cuidado de nuestros niños y niñas.
- El llamado de los grupos étnicos en tiempos de pandemia es la invitación a ser más humanos, más solidarios y mejores personas con los otros y con el planeta.



















