En la primera infancia los niños y niñas están en edad de jugar, de aprender a compartir con amigos y amigas, de crear, comunicar, expresar, preguntar, explorar, hacer hipótesis, de socializar, aprender y desarrollar formas de relacionarse con otras personas diferentes a las de su grupo primario; por lo tanto, todavía no es tiempo de hacer tareas, planas, aprender números, letras y operaciones matemáticas. En Mis Manos Te Enseñan te contamos de qué se trata el tránsito armónico.
¿Qué es el tránsito armónico?
Son las acciones que deben realizar las entidades educativas y territoriales para favorecer la transición de las niñas y niños de las modalidades de educación inicial al grado transición como primer grado obligatorio. En este proceso, el Estado hace las veces de garante del proceso, y la familia y la sociedad son corresponsables del mismo.
El tránsito armónico permite a los niños consolidar, fortalecer y transformar sus aprendizajes y desarrollo a lo largo de la vida. Además, en educación inicial, busca disminuir el riesgo de deserción y repitencia.
Es importante entender que no se trata de que el niño y la niña pasen de un ambiente a otro y que haya continuidad; se trata de cómo a los niños se les ofrecen las condiciones para que su participación sea activa, en un medio donde puedan construir relaciones tranquilas y seguras.
Importancia de promover tránsitos armónicos
¿Cómo trabaja el ICBF para garantizar un tránsito armónico en niños y niñas?
En Colombia, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) desde 2016 trabaja de forma articulada con el Departamento Administrativo para la Prosperidad Social (DPS) y el Ministerio de Educación, en el diseño e implementación de una ruta de tránsito armónico de los niños y niñas de 5 y 6 años al grado transición.
En este trabajo articulado, el ICBF desarrolló una guía orientadora dirigida a las Entidades Administradoras del Servicio (EAS), Unidades de Servicios (UDS) de cada una de las modalidades de atención de primera infancia, los centros zonales y las direcciones regionales del ICBF.
¿Quiénes acompañan las transiciones de los niños y las niñas?
Por otra parte, las familias o cuidadores también viven su propio proceso de transición, cambios que implican transformaciones en sus dinámicas internas, por ejemplo: el desprendimiento de los hijos e hijas, la comprensión de la salida del hogar a otros espacios de socialización, el ajuste en los horarios y rutinas para la alimentación, para la hora del sueño y el descanso, para el acompañamiento a las nuevas experiencias educativas, entre otras. Por esta razón, es muy importante que las familias y cuidadores se preparen para asumir y acompañar los cambios que traen las transiciones.
Los agentes educativos y demás equipos que hacen parte de las UDS en los servicios de educación inicial en la primera infancia tienen una responsabilidad directa en la efectividad y armonía del tránsito a la educación formal de los niños y niñas, pues son los principales dinamizadores del ambiente en los entornos educativos, de la oferta educativa y de propiciar un escenario intencionado que acoja y acompañe las experiencias de transición que viven las niñas y niños.
Además, el talento humano de los centros zonales y regionales de ICBF hace parte de esta corresponsabilidad ya que son los encargados del seguimiento, apoyo técnico/operativo y acompañamiento de las acciones que se defina a nivel territorial en las mesas de tránsito y demás espacios de articulación.
Por otra parte, las EAS como operador de programas sociales que se relacionan y vinculan con el Sistema Nacional de Bienestar Familiar, permanecen en constante interacción con las comunidades, entidades locales y familias, con el fin de garantizar los derechos de los niños y niñas por medio de la prestación de servicios de educación inicial, lo que implica contar con información actualizada, ser agente articulador y dinamizador de las estrategias y acciones diseñadas para los niños, las niñas y sus familias.
Entre las competencias que tienen las entidades que tienen responsabilidad sobre esta transición se encuentran:
✓ Comprender la transición como un proceso que hace parte fundamental del desarrollo integral de los niños y las niñas, la garantía de sus derechos.
✓ Organizar la oferta y la demanda.
✓ Planear, implementar estrategias y hacer seguimiento al tránsito de los niños, las niñas y sus familias.
Es importante que todos los niños y niñas transiten según los tiempos establecidos al grado de transición y es corresponsabilidad de todos, familia, sociedad y Estado, asegurar las condiciones de atención, cuidado y protección para ese paso seguro.
¿Qué es el tránsito armónico?
Son las acciones que deben realizar las entidades educativas y territoriales para favorecer la transición de las niñas y niños de las modalidades de educación inicial al grado transición como primer grado obligatorio. En este proceso, el Estado hace las veces de garante del proceso, y la familia y la sociedad son corresponsables del mismo.
El tránsito armónico permite a los niños consolidar, fortalecer y transformar sus aprendizajes y desarrollo a lo largo de la vida. Además, en educación inicial, busca disminuir el riesgo de deserción y repitencia.
Es importante entender que no se trata de que el niño y la niña pasen de un ambiente a otro y que haya continuidad; se trata de cómo a los niños se les ofrecen las condiciones para que su participación sea activa, en un medio donde puedan construir relaciones tranquilas y seguras.
Importancia de promover tránsitos armónicos
- Garantizar la continuidad y permanencia de niñas y niños en el sistema educativo
- Promover un entorno educativo protector y acogedor para niñas y niños
- Fortalecer las acciones pedagógicas y fortalecer la pertinencia
- Promover el ajuste de las dinámicas familiares
¿Cómo trabaja el ICBF para garantizar un tránsito armónico en niños y niñas?
En Colombia, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) desde 2016 trabaja de forma articulada con el Departamento Administrativo para la Prosperidad Social (DPS) y el Ministerio de Educación, en el diseño e implementación de una ruta de tránsito armónico de los niños y niñas de 5 y 6 años al grado transición.
En este trabajo articulado, el ICBF desarrolló una guía orientadora dirigida a las Entidades Administradoras del Servicio (EAS), Unidades de Servicios (UDS) de cada una de las modalidades de atención de primera infancia, los centros zonales y las direcciones regionales del ICBF.
¿Quiénes acompañan las transiciones de los niños y las niñas?
- Familias y cuidadores
Por otra parte, las familias o cuidadores también viven su propio proceso de transición, cambios que implican transformaciones en sus dinámicas internas, por ejemplo: el desprendimiento de los hijos e hijas, la comprensión de la salida del hogar a otros espacios de socialización, el ajuste en los horarios y rutinas para la alimentación, para la hora del sueño y el descanso, para el acompañamiento a las nuevas experiencias educativas, entre otras. Por esta razón, es muy importante que las familias y cuidadores se preparen para asumir y acompañar los cambios que traen las transiciones.
Los agentes educativos y demás equipos que hacen parte de las UDS en los servicios de educación inicial en la primera infancia tienen una responsabilidad directa en la efectividad y armonía del tránsito a la educación formal de los niños y niñas, pues son los principales dinamizadores del ambiente en los entornos educativos, de la oferta educativa y de propiciar un escenario intencionado que acoja y acompañe las experiencias de transición que viven las niñas y niños.
Además, el talento humano de los centros zonales y regionales de ICBF hace parte de esta corresponsabilidad ya que son los encargados del seguimiento, apoyo técnico/operativo y acompañamiento de las acciones que se defina a nivel territorial en las mesas de tránsito y demás espacios de articulación.
Por otra parte, las EAS como operador de programas sociales que se relacionan y vinculan con el Sistema Nacional de Bienestar Familiar, permanecen en constante interacción con las comunidades, entidades locales y familias, con el fin de garantizar los derechos de los niños y niñas por medio de la prestación de servicios de educación inicial, lo que implica contar con información actualizada, ser agente articulador y dinamizador de las estrategias y acciones diseñadas para los niños, las niñas y sus familias.
Entre las competencias que tienen las entidades que tienen responsabilidad sobre esta transición se encuentran:
✓ Comprender la transición como un proceso que hace parte fundamental del desarrollo integral de los niños y las niñas, la garantía de sus derechos.
✓ Organizar la oferta y la demanda.
✓ Planear, implementar estrategias y hacer seguimiento al tránsito de los niños, las niñas y sus familias.
Es importante que todos los niños y niñas transiten según los tiempos establecidos al grado de transición y es corresponsabilidad de todos, familia, sociedad y Estado, asegurar las condiciones de atención, cuidado y protección para ese paso seguro.