DOCUMENTO CONPES DNP-2847 UDS-DISAL
(Bogotá, mayo 29 de 1996)
DEPARTAMENTO NACIONAL DE PLANEACIÓN
PLAN NACIONAL DE ALIMENTACIÓN Y NUTRICIÓN 1996-2005
Documento original: CONPES DNP-2847 UDS-DISAL
I. ANTECEDENTES
En el marco de la Conferencia Internacional de Nutrición realizada en Roma en 1992, a la cual asistieron los representantes de 159 Estados, entre ellos Colombia, se registraron (a) la Declaración Mundial que reconoce el derecho de cada persona a acceder a una alimentación nutricionalmente balanceada y apta para el consumo humano, y (b) la aprobación del Plan de Acción para la Nutrición que involucra el compromiso de elaborar los Planes Nacionales con la inclusión de metas y objetivos medibles, de acuerdo con las directrices de dicho Plan.
En Colombia el Plan Nacional de Alimentación y Nutrición, se inscribe en las políticas sectoriales de salud y seguridad social, agricultura, educación, comunicación y medio ambiente. Su propósito es garantizar la convergencia de las acciones, atacando los diferentes aspectos que inciden en una mala nutrición y alimentación, procurando que las intervenciones se ejecuten en forma integrada sobre la población más pobre. Lo anterior exige el concurso coordinado de entidades del orden municipal, departamental y nacional para que, en forma coherente, se optimice el gasto en alimentación y nutrición.
Este documento somete a consideración del CONPES las Líneas de Acción que conforman el Plan Nacional de Alimentación y Nutrición para Colombia 1996-2005; en él se definen las acciones y se asignan los recursos económicos para el período 1996-1998. Las intervenciones para el período 1999-2005 deben formularse periódicamente, de acuerdo con los logros alcanzados y la situación identificada.
II. DIAGNOSTICO
La malnutrición afecta a una gran parte de la población mundial y está condicionado por factores sociales, económicos y políticos que influyen en la disponibilidad, consumo y aprovechamiento biológico de los alimentos.
Entre 1980 y 1993 la región Latinoamericana y el Caribe presentó una prevalencia de la desnutrición global (bajo peso para la edad) de 11%, y para la desnutrición crónica o retraso del crecimiento (baja talla para la edad) de 21%(1).
Colombia se ubica por debajo del promedio de la región. Los estudios nacionales realizados en los últimos 30 años muestran que la prevalencia de la desnutrición global en menores de 5 años disminuyó del 21% en 1965 al 8 % en 1995 y la desnutrición crónica pasó del 32% al 15% en el mismo periodo(2) (Cuadro 1 y Gráfico 1).
No obstante estos avances, las diferencias dentro del país son preocupantes. La desnutrición global en las subregiones Pacífica, Guajira/Cesar/Magdalena y Cauca/Nariño, alcanzan 17%, 15% y 14%, respectivamente. La desnutrición crónica afecta principalmente a las regiones Pacífica y Bogotá con 17% y Atlántica con 15%. Este tipo de desnutrición es mayor en el área rural donde llega a 19%, comparada con 13% en el área urbana(3).
Otro indicador del estado nutricional es el peso al nacimiento, el cual refleja la calidad de vida de un país. El bajo peso al nacer (nacidos vivos con menos de 2.500 grs), es un indicador indirecto del estado nutricional de la mujer y un factor determinante de la mortalidad perinatal y de la morbimortalidad infantil. En 1990 la incidencia de bajo peso en cinco ciudades del país fue de 9 %, con una variación entre 5% y 11%(4).
Entre 1975 y 1995, la mortalidad infantil bajó de 54 a 28 defunciones por mil nacidos vivos. La mayor mortalidad infantil se registró en la Región Pacífica con 39 por mil, y por zona es mayor en el área rural donde llega a 32 por mil comparada con 26 por mil en el área urbana(5).
Varios estudios señalan que el grado de educación de la madre es un factor determinante del estado nutricional de los hijos, a mayor nivel educativo de la madre es mejor el estado de nutrición del niño. La desnutrición crónica de los niños de madres sin educación alcanzó una prevalencia de 26%, comparada con 9% en madres con educación secundaria y 6% en madres con educación superior (6).
Los bajos ingresos afectan a más del 50% de la población y, de éstos, el 20% no alcanza a cubrir la totalidad de las necesidades básicas de calorías y nutrientes y por lo tanto se encuentran en inseguridad alimentaria(7). El Indicador de Capacidad de Compra del SISVAN, registró inseguridad alimentaria en los hogares de bajos ingresos de 13 ciudades del país(8).
4 Un incidencia del 5% es característica de poblaciones bien nutridas y una superior al 10% indica problema de salud pública. OPS/OMS - LAC HNS- USAID, Pautas para Políticas Sectoriales de Nutrición y Alimentación en Países de América Latina y el Caribe, USA septiembre de 1995.
Otros problemas nutricionales y de salud pública por resolver son las deficiencias de yodo, hierro y vitamina A. El déficit de yodo en la sal para consumo humano, ocasionado por el cierre de Concesión Salinas y la precaria vigilancia y control, hizo resurgir el problema del bocio endémico en el país. En 1995 la prevalencia de bocio en escolares, varió entre el 7% y el 16%(9). En 1996 se actualiza la norma sobre comercialización de la sal para consumo humano y los reportes del INVIMA en el cuarto trimestre de 1995 señalan una recuperación del problema al encontrar que el 70% de la sal cumple con la norma nacional.
La falta de calidad e inocuidad de los alimentos se relaciona con la presencia de enfermedades infecciosas diarréicas, respiratorias y parasitarias que, además de estar asociadas al estado nutricional, ocupan las primeras causas de morbimortalidad en menores de 5 años. Si bien se estima que el 65% de las fábricas de alimentos tienen algún control de las autoridades sanitarias, éste no es permanente. De los productos alimenticios que se comercializan, sólo el 45% tienen vigilancia sanitaria, y ésta no cubre satisfactoriamente los productos elaborados artesanalmente que son los de mayor riesgo.
El incremento de alimentos vendidos en la vía pública ocasiona problemas de salud pública debido a la ausencia de vigilancia y control(10(; por otra parte, no existen normas que obliguen a los fabricantes al enriquecimiento y fortificación de alimentos de consumo básico.
III. OBJETIVOS
El objetivo general del Plan Nacional de Alimentación y Nutrición PNAN es contribuir al mejoramiento de la situación alimentaria y nutricional de la población
colombiana, en especial de la más pobre y vulnerable, integrando acciones multisectoriales en las áreas de salud, nutrición, alimentación, agricultura, educación, comunicación y medio ambiente.
Los objetivos específicos son:
1. Mejorar las condiciones para el acceso a los alimentos en los hogares más pobres y vulnerables, mediante programas integrales de complementación alimentaria y de producción de autoconsumo.
2. Garantizar un control de calidad de alimentos en términos de la inocuidad y la veracidad de su composición.
3. Disminuir las deficiencias de micronutrientes, especialmente hierro y vitamina A, y eliminar los desórdenes por deficiencia de yodo.
4. Mejorar las condiciones del medio ambiente, para lograr un adecuado aprovechamiento biológico de los alimentos.
5. Promover la lactancia materna en forma exclusiva hasta los seis meses y con alimentación complementaria adecuada hasta los dos años de edad.
6. Promover una cultura por una alimentación y estilos de vida saludables.
7. Promover la investigación en las áreas de nutrición y alimentación en apoyo al desarrollo del Plan Nacional de Alimentación y Nutrición.
8. Fortalecer la capacidad técnica y gerencial del recurso humano para apoyar y garantizar el buen desarrollo del Plan.
IV. METAS
Las metas del PNAN para el período 1996-1998 son:
1. Disminuir la brecha de la desnutrición global de los menores de cinco años en un 10%, especialmente en las subregiones que están por encima de 8%, promedio nacional actual.
2. Lograr la yodación y la fluorización del 100% de la sal para consumo humano, de acuerdo con las normas nacionales.
3. Lograr la fortificación con micronutrientes al menos de un alimento de consumo básico.
4. Desarrollar el sistema nacional de control de calidad e inocuidad de los alimentos.
5. Desarrollar guías alimentarias para la población menor de cinco años y para las mujeres gestantes y lactantes.
V. LINEAS DE ACCIÓN
El Plan comprende Ocho Líneas de Acción que sirven de guía para el diseño de políticas de nutrición y alimentación en los planes de desarrollo a nivel municipal, departamental y nacional. Cada Línea de Acción define los proyectos que se realizarán entre 1996 y 1998. Los programas y proyectos que se deriven de esta política deberán ajustar sus objetivos y estrategias a los siguientes lineamientos.
A. Seguridad Alimentaria
1. A nivel de Hogares
Las acciones tienen como objetivo garantizar la capacidad de producir o comprar suficientes alimentos de buena calidad para satisfacer el bienestar nutricional de todos los miembros de la familia. Los programas de la política agraria hacen posible el acceso progresivo de los agricultores más necesitados a los insumos tales como tierra, capacitación empresarial, tecnología y crédito.
El programa de Comercialización Social de Alimentos, adelantado por las entidades del sector agrario, en coordinación con los entes territoriales, promueve el desarrollo de sistemas asociativos de mercadeo. Los Mercaplazas reducen los márgenes de comercialización para facilitar el acceso a la canasta básica de bienes a los sectores populares. Para las zonas rurales y urbanas las Despensas y Lanchas Tienda ofrecen productos de la canasta familiar a precios módicos (11).
El Ministerio de Agricultura, en coordinación con el ICBF, el INPA, el IDEMA, las UMATA, la Red de Solidaridad, las universidades y organizaciones no gubernamentales, diseñará el Proyecto Seguridad Alimentaria para la Familia Rural, alternativo a las acciones del Bono Alimentario Rural para las zonas de difícil acceso y con mayores problemas nutricionales(12). Este proyecto se iniciará en los nuevos departamentos, región pacífica y otras áreas del país, como prueba piloto, y contemplará la selección de beneficiarios, identificación de problemas nutricionales y alimentarios, selección de productos, entrega de insumos agropecuarios y pesqueros, asistencia técnica, evaluación comparativa y seguimiento.
Para la Seguridad Alimentaria en los Hogares se promoverá la creación de estrategias a nivel municipal, con la participación de organizaciones no gubernamentales y universidades(13).
2. A nivel de Grupos Vulnerables
La política de seguridad alimentaria incluye medidas asistenciales para ayudar a grupos vulnerables. Es necesario ampliar la cobertura y la calidad de las acciones. El Plan acoge las políticas sociales dirigidas a la niñez, cuyos programas tienen como objetivo mejorar el estado nutricional, propiciar el desarrollo sicosocial en neonatos, preescolares, escolares, gestantes y madres lactantes, y fortalecer mecanismos de organización y participación comunitaria(14).
En los Hogares Comunitarios de Bienestar, el proyecto FAMI, que atiende mujeres gestantes y lactantes y a sus niños menores de dos años, llegará a 630 mil beneficiarios; de igual manera ampliará la ración alimentaria de los 890 mil menores de 7 años que hacen parte de los programas de la Red de Solidaridad Social. El subsidio alimentario a niños en edad preescolar del área rural no atendidos en hogares comunitarios, denominado Bono Alimentario Rural, cubrirá 140 mil niños en el período 1995-1998.
Para la población de 7 a 14 años escolarizada y desescolarizada con NBI, la meta institucional se fija en la transformación de 914 mil refrigerios simples en refrigerios reforzados, los cuales aportan el 20% de las recomendaciones nutricionales durante 130 días al año.
Para los indígenas y los ancianos más pobres, el ICBF ofrece actividades educativas y de complementación alimentaria.
Las entidades comprometidas en el PNAN promoverán el diseño y puesta en marcha de proyectos para grupos vulnerables no cubiertos en la actualidad. El Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, el ICBF, las Consejerías Presidenciales para la Política Social y la Económica y de Competitividad, en coordinación con los entes territoriales y la empresa privada, diseñarán y ejecutarán estrategias de complementación alimentaria que incluyan el fomento al consumo de leche, en escolares de zonas marginadas del país. El proyecto integra acciones en salud, nutrición y educación.
En esta línea de acción se comprometerán recursos del ICBF por $760.871 millones (pesos de 1995) para los tres años.
B. Protección al consumidor mediante el control de la calidad y la inocuidad de los alimentos
Los Ministerios de Salud y Agricultura, el INVIMA y los entes territoriales, ejecutarán proyectos integrales, que busquen mejorar las condiciones de calidad e inocuidad de los alimentos, para contribuir al bienestar nutricional.
El proyecto de Modernización de la Legislación Sanitaria tiene como objetivo revisar la legislación vigente para mejorar las condiciones de etiquetado, vigilancia y control de los alimentos. Su aplicación dará cobertura al 100% de los productores de alimentos en el país.
Con la implantación del Sistema de Aplicación de las Técnicas de Análisis de Riesgos y Puntos Críticos de Control, se busca detectar los problemas que afectan la calidad de los alimentos desde su producción hasta el consumo (productos químicos, drogas veterinarias, microorganismos patógenos, entre otros), para lo cual se exigirá la instalación de los sistemas de vigilancia y control establecidos en las normas de producción o de buenas prácticas de manufactura a los productores de alimentos. Se espera cubrir el 80% de la industria de alimentos, el 50% de las artesanales, y el 100% de hogares comunitarios, restaurantes escolares y ancianatos, entre otros.
El Programa de Vigilancia Epidemiológica de Enfermedades Transmitidas
por los Alimentos VETA permitirá conocer la morbimortalidad de estas enfermedades y adoptar medidas correctivas a nivel nacional. Se fortalecerá el Proyecto Control Sanitario de Alimentos Expendidos en la Vía Pública en las ciudades de Barranquilla, Buenaventura, Armenia e Ipiales, para luego de su evaluación extenderlo a otras ciudades del país. El Programa Fortalecimiento y Desarrollo de la Red Nacional de Laboratorios de Análisis de Alimentos apoyará el funcionamiento de los programas anteriores.
El ICBF adelantará la actualización de la Tabla de Composición de Alimentos Colombianos que, con la Hoja de Balance de Alimentos, constituye un instrumento de apoyo para las acciones educativas y de orientación al consumidor.
En esta línea de acción se comprometerán recursos del ICBF, Ministerio de Salud y el INVIMA, por $5.553 millones (pesos de 1995) para los tres años.
C. Prevención y control de las deficiencias de micronutrientes, especialmente Vitamina A, Hierro y Yodo
Con la participación de los sectores público y privado, se requiere prevenir y controlar estas deficiencias mediante la adopción de las siguientes medidas: a) producción de alimentos de alto valor biológico, b) fortificación de alimentos de consumo básico, y c) entrega de micronutrientes como medida de salud pública.
El Proyecto de Producción de Bienestarina, que apoya los programas de complementación alimentaria del ICBF, ajustará la fórmula a las nuevas necesidades de los beneficiarios, de acuerdo con los resultados de los estudios que se adelanten.
En materia de fortificación se cuenta con la norma para la yodación y fluorización de la sal de consumo humano. A finales de 1998 se espera tener fortalecidos los mecanismos de vigilancia y control y actualizadas las normas, con el fin de garantizar que el 100% de la sal que se comercializa, cumpla con las recomendaciones nacionales. El Instituto Colombiano Agropecuario ICA tiene definida la norma sobre la comercialización de la sal para consumo animal (15). Es necesario fortalecer la vigilancia y control de estas medidas y promover a nivel nacional el uso de sal mineralizada para el consumo animal.
Para iniciar la fortificación de alimentos de consumo básico en el país, se impulsarán iniciativas como la de la Federación Nacional de Molineros, para fortificar la harina de trigo con hierro y complejo B entre otros micronutrientes. Otros alimentos de consumo básico que pueden ser fortificados son el azúcar, la harina de maíz y el arroz, para lo cual, el grupo técnico, coordinado por el Ministerio de Salud, concertarán con la industria de alimentos las normas respectivas, que garantizarán el cumplimiento de esta medida.
La comercialización de alimentos de buena calidad, como los fortificados con micronutrientes y los de alto valor biológico, debe hacer parte de la estrategia de competitividad para la internacionalización de la economía. Esto requiere la concertación entre los sectores público y privado y un proceso de integración sectorial, con el fin de diseñar estrategias conjuntas, tecnológicas, productivas, comerciales, de infraestructura y capacitación del recurso humano, que permitan utilizar eficientemente los recursos productivos y generar ventajas comparativas sostenibles(16).
Como medida de prevención y tratamiento, a través del Plan Obligatorio de Salud se entregará hierro y otros micronutrientes a gestantes, menores de 5 años y escolares. La suplementación con vitamina A dependerá de los resultados del Estudio Nacional de Deficiencias de Micronutrientes que está desarrollando el Instituto Nacional de Salud.
En esta línea de acción se comprometerán recursos del ICBF, Ministerio de Salud e INVIMA por $55.937 millones (pesos de 1995) para los tres años.
D. Prevención y tratamiento de las enfermedades infecciosas y parasitarias
Las condiciones de salud y del medio ambiente son fundamentales para lograr un adecuado aprovechamiento biológico de los alimentos. Las enfermedades infecciosas, como las diarréicas, respiratorias, inmunoprevenibles y parasitarias, están ligadas estrechamente a las condiciones de salubridad, y afectan especialmente a los niños y jóvenes llevándolos muchas veces a la desnutrición, lo cual facilita que las infecciones sean recurrentes, agravando aún más el problema. La prevención y tratamiento de estas infecciones, amerita intervenciones complementarias de educación, saneamiento básico y salud.
En educación, las escuelas y colegios podrán fomentar el desarrollo de acciones educativas tendientes a mejorar las condiciones nutricionales y a prevenir las enfermedades infecciosas y parasitarias a través de sus respectivos Proyectos Educativos Institucionales (PEI), las cuales se podrán realizar en el servicio social estudiantil. A la ejecución de estas acciones se podrán vincular organismos oficiales y privados y las entidades territoriales que deseen dar continuidad a los programas Supervivir y Pefadi.
Los programas y acciones para el mejoramiento ambiental están explícitos en el Plan de Agua, el cual tiene como objetivo reducir los efectos negativos de las aguas residuales sobre los ríos y cuerpos receptores, así como mejorar la calidad de los servicios de acueducto y saneamiento básico para todos los habitantes, con el fin de alcanzar coberturas totales promedio de 90% en acueducto y 77% en alcantarillado.
El Ministerio de Salud ha diseñado estrategias de capacitación al personal, educación a la comunidad, vigilancia epidemiológica, investigación, evaluación y movilización social para la prevención y tratamiento de las enfermedades diarréicas, respiratorias y parasitarias. El Plan Obligatorio de Salud garantiza la atención en los casos de enfermedad dirréica, infección respiratoria y desparasitación, para lo cual el gobierno, en sus diferentes niveles, promoverá la afiliación efectiva de toda su población al Sistema de Seguridad Social en Salud
El Programa Ampliado de Inmunizaciones PAI constituye una de las herramientas del sector salud para el control y eliminación de las enfermedades inmunoprevenibles, entre ellas el sarampión, asociado directamente al estado nutricional. Este programa incluirá en su promoción contenidos de lactancia materna y nutrición; además vinculará a grupos vulnerables a los programas de nutrición y alimentación del PNAN.
El PNAN promoverá y apoyará las iniciativas generadas por las comunidades para la promoción y el autocuidado de la salud. La comunidad de la región Pacífica con el apoyo del Ministerio de Comunicaciones y de agencias internacionales, está adelantando el Proyecto para la Prevención del Cólera, el cual ha permitido a través de un proceso de comunicación popular, incorporar en los pobladores hábitos y costumbres orientados a la prevención.
En esta línea de acción se comprometerán recursos de los Ministerios de Salud y Comunicaciones y el ICBF, por $54.506 millones (pesos de 1995) para los tres años.
E. Promoción, protección y apoyo a la lactancia materna
La práctica de la lactancia materna representa un aporte al desarrollo de una sociedad sana, especialmente por sus contribuciones a la salud de la madre y el niño. Se requiere brindar apoyo a las madres para que puedan amamantar a sus hijos hasta los dos años: en forma exclusiva hasta los 6 meses y a partir de esta edad con alimentación complementaria adecuada. Estas actividades se llevan a cabo a través del Plan Nacional de Promoción, Protección y Apoyo a la Lactancia Materna del Ministerio de Salud, que define, por una parte, acciones educativas dirigidas a la comunidad, la familia, la mujer y el niño y, por otra, a mejorar las prácticas institucionales que conllevan al reconocimiento de hospitales como Amigos de la Madre y el Niño.
Es necesario reformular el Plan Nacional de Lactancia Materna para el periodo 1996-2005, fortalecer y crear redes de apoyo comunitario para las madres lactantes y determinar los factores que influyen en la práctica de la lactancia materna en las madres FAMI del ICBF.
Con el fin de garantizar la atención que requiere el recién nacido, el Ministerio de Salud promoverá acciones conjuntas entre el Ministerio de Trabajo, los empleadores, las madres, la familia y la comunidad, con el fin de divulgar y hacer cumplir la normatividad existente sobre la protección de la maternidad(17). Por otra parte, el Ministerio con la Dirección Nacional de Equidad para las Mujeres deberán impulsar algunas reformas a la normatividad que favorezcan la participación laboral de la mujer, haciéndola más compatible con la atención que requiere el niño(18). Sin embargo, las modificaciones que se realicen deben ser evaluadas para no desestimular la vinculación de la fuerza laboral femenina.
Se espera al final de 1998 acreditar a 150 nuevos hospitales como Amigos de la
Madre y el Niño, y contar con normas actualizadas que protejan la lactancia materna.
En esta línea de acción se comprometerán recursos del Ministerio de Salud y el ICBF por $733 millones (pesos de 1995) para los tres años.
F. Promoción de la salud, alimentación y estilos de vida saludables
La promoción de la salud integra las acciones que realizan la población, las direcciones departamentales de salud, las autoridades sanitarias y los sectores sociales productivos, con el objeto de garantizar, más allá de la ausencia de enfermedad, mejores condiciones de salud a los individuos, familias y colectividades. Las actividades de promoción de la salud estarán dirigidas a proteger la vida de los individuos, familias y sus comunidades para aumentar los años de vida sana y productiva.
El Ministerio de Salud impulsa el fomento y cuidado de la salud. El Proyecto Salud Sexual y Reproductiva, busca contribuir a reducir la mortalidad perinatal, mejorar las condiciones de salud y nutrición de las madres y de los recién nacidos. Los proyectos: a) Promoción y Fomento de la Salud Integral de la Mujer, b) Atención Integral al menor de 10 años y c) Atención Integral al Adolescente, buscan mejorar la salud y el bienestar de acuerdo con el perfil epidemiológico de cada uno de estos grupos y la reducción de los índices de desnutrición. El Proyecto Salud Bucal para Todos permitirá disminuir la morbilidad oral en toda la población, para lo cual se pretende alcanzar coberturas superiores al 90% en educación, promoción y prevención incluyendo las topicaciones con flúor, aumentar el componente asistencial en 50% y fortalecer las medidas de fluorización de la sal para consumo humano.
El comité de movilización social del Plan Nacional de Alimentación y Nutrición, coordinado por el Ministerio de Comunicaciones, está diseñando estrategias de sensibilización y movilización social, dirigidas a las autoridades, medios de comunicación y población en general, para incluir las políticas conducentes a obtener una alimentación y estilos de vida saludables en los planes de desarrollo.
Una estrategia innovadora será la elaboración de Guías Alimentarias para la Población Colombiana, que permitirán educar, orientar al consumidor y promover una dieta saludable en la población. Para su elaboración e instrumentación se conformarán grupos técnico-científicos coordinados por el ICBF, en los que participan los Ministerios de Salud, Comunicaciones y Educación, universidades, organizaciones no gubernamentales y agencias internacionales. A finales de 1998 el país contará con Guías Alimentarias para la población Colombiana.
En esta línea de acción se comprometerán recursos de los Ministerios de Salud y Comunicaciones por $2.054 millones (pesos de 1995) para los tres años.
G. Evaluación y seguimiento en aspectos nutricionales y alimentarios
Con el fin de disponer de una información oportuna, que oriente la toma de decisiones y que haga posible el seguimiento y evaluación de impacto del PNAN en todos los niveles, los Ministerio de Salud y Agricultura y el ICBF reactivarán en los entes territoriales la vigilancia epidemiológica del estado nutricional de la población.
Con la participación de entidades públicas y privadas, durante el período se actualizará el diagnóstico de la situación nutricional del país. El Instituto Nacional de Salud publicará en el segundo semestre de 1996 los resultados del Estudio de Deficiencia de Micronutrientes. El INVIMA adelantará los estudios que permitirán identificar los contaminantes de los alimentos a lo largo de la cadena productiva y evaluar las prácticas de manufactura en productos cárnicos, con el fin de fortalecer la vigilancia epidemiológica para prevenir brotes de intoxicación de origen alimentario.
El ICBF realizará en 1996 la evaluación de impacto en el estado nutricional de los niños atendidos en los Hogares de Bienestar. A través del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, Colciencias y los Ministerios de Salud y Agricultura y Desarrollo Rural, se promoverá y apoyará la investigación básica y aplicada en las áreas de nutrición y alimentación.
En esta línea de acción se comprometerán recursos de los Ministerios de Salud y Agricultura, INS, ICBF e INVIMA por $1.965 millones (pesos de 1995) para los tres años.
H. Formación del recurso humano en políticas de alimentación y nutrición
Para elaborar y mantener planes y programas de nutrición con calidad y efectividad, se requiere que el recurso humano esté capacitado y actualizado en el diseño e implementación de políticas de alimentación y nutrición.
El Ministerio de Salud, a través de recursos humanos, promoverá en los centros de capacitación, la inclusión en los programas de formación de personal de salud y educación, las políticas, líneas de acción y actividades del PNAN.
El Consejo Nacional de Educación Superior CESU, definirá los requisitos mínimos para la aprobación y funcionamiento de programas de las áreas de nutrición y alimentación. Asimismo, definirá las políticas y procedimientos para la acreditación de estos programas que adelantan las instituciones de educación superior.
VI. FINANCIACIÓN
La financiación del Plan de Alimentación y Nutrición será una responsabilidad compartida por el Gobierno en todos sus niveles, la empresa privada, las agencias internacionales, las ONG y la ciudadanía.
En el Plan Nacional de Inversiones 1994-1998 (Ley 188 de 1995) se contempla la financiación parcial, a través del presupuesto de los diversos sectores involucrados y entidades comprometidas. Se promoverá la participación territorial para incluir políticas de nutrición y alimentación en los planes de desarrollo.
Para facilitar el cumplimiento de las funciones del Instituto Nacional de Medicamentos y Alimentos, el gobierno nacional deberá estudiar las diferentes fuentes del Instituto, por cuanto el artículo 4 numeral 22 del Decreto 1290 de 1994, que definía el funcionamiento con recursos propios, fue declarado inexequible por la Honorable Corte Constitucional en el mes de abril de 1996.
La empresa privada contribuye con infraestructura, tecnología y recursos económicos para el desarrollo de programas con impacto social. Las ONG brindan su apoyo técnico para el desarrollo del plan y promueven la adopción de las políticas propuestas.
La cooperación de agencias internacionales como UNICEF, OPS/OMS, FAO y PMA, entre otras, continuará siendo un importante mecanismo de apoyo en la ejecución de los diversos programas del PNAN (Cuadros 2 y 3).
VII. RECOMENDACIONES
Los Ministerios de Salud, Educación, Comunicaciones, Medio Ambiente y Agricultura, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y el Departamento Nacional de Planeación, recomiendan al CONPES:
1. Adoptar los lineamientos de política y los programas propuestos en el Plan
Nacional de Alimentación y Nutrición.
2. Solicitar al Departamento Nacional de Planeación:
· En coordinación con las entidades participantes del PNAN, elaborar el Plan de Acción, siguiendo los lineamientos de este documento.
· Coordinar la presentación y entrega del documento del PNAN a la FAO, dando cumplimiento a la carta de acuerdo del 14 de junio de 1995, firmada entre las partes.
· Con el apoyo de las entidades comprometidas, realizar el seguimiento, evaluación y ajustes a las metas del PNAN.
3. Solicitar al Ministerio de Salud:
· Fortalecer y desarrollar los sistemas de vigilancia epidemiológica nutricional y de las enfermedades transmitidas por los alimentos.
· Revisar, ampliar y actualizar la legislación sanitaria para el programa de
Control de Calidad e Inocuidad de los Alimentos.
· Expedir las normas para la fortificación de alimentos de consumo básico.
· Incluir contenidos de nutrición en la promoción del Programa Ampliado de
Inmunizaciones.
· Fortalecer el desarrollo de programas que permitan ejercer el control de calidad del agua para consumo humano.
4. Solicitar al INVIMA:
· Desarrollar el sistema de Análisis de Riesgo y Puntos Críticos de Control para fortalecer el programa de Calidad de Alimentos.
· Acreditar, con el apoyo del Ministerio de Salud, los laboratorios de alimentos de la Red Nacional, para que las entidades territoriales, sirvan de apoyo al laboratorio de referencia.
· Realizar los estudios sobre contaminantes químicos y microbiológicos en los alimentos.
5. Solicitar al ICBF:
· Adelantar el estudio de reformulación de la Bienestarina.
· Mantener una evaluación periódica del impacto nutricional de los programas bajo su responsabilidad.
· Asegurar mayor cubrimiento nutricional y aumento de la cobertura en la población de escolares y adolescentes.
· Adelantar la actualización de la Tabla de Composición de Alimentos
Colombianos y coordinar la elaboración de las Guías Alimentarias.
· Realizar y divulgar en 1996 el estudio de impacto del estado nutricional y deficiencia de Hiero y Vitamina A, de los niños atendidos por los hogares de bienestar.
· Diseñar y poner en marcha con entidades ejecutoras, autoridades municipales y empresa privada, estrategias alimentarias nutricionales que incluyan el fomento al consumo de leche, en escolares no atendidos por otros programas.
6. Solicitar al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural:
· Diseñar y coordinar el Proyecto Seguridad Alimentaria para la Familia Rural.
· Incorporar objetivos de seguridad alimentaria en los programas que desarrollan las instituciones del sector agrícola.
7. Solicitar al Ministerio de Educación Nacional promover la incorporación de contenidos de nutrición, higiene y saneamiento, en los Proyectos Educativos Institucionales (PEI).
8. Solicitar al Consejo Nacional de Educación Superior:
· Definir los requisitos mínimos para la aprobación y funcionamiento de los programas de las áreas de nutrición y alimentación.
· Definir las políticas y procedimientos para la acreditación de los programas de nutrición y alimentación que adelantan las instituciones de educación superior.
9. Solicitar al Ministerio de Desarrollo Económico:
· Promover el desarrollo de microempresas para la producción y comercialización de alimentos de alto valor biológico.
· Dar cumplimiento a la política y programas del Plan de Agua, definido por el
CONPES documento 2767 de marzo 22 de 1995.
10. Solicitar al Ministerio de Comunicaciones:
· Coordinar el diseño y aplicación de estrategias de comunicación masiva para orientación y defensa del consumidor.
· Coordinar el diseño de la estrategia de movilización social para el desarrollo del Plan Nacional de Alimentación y Nutrición.
11. Solicitar al Ministerio del Medio Ambiente fortalecer los planes de protección ambiental orientados a garantizar la calidad del agua, controlar los productos químicos utilizados en la minería que contaminan las aguas y deterioran el medio ambiente, regular la aplicación de productos químicos en la agricultura, y las demás recomendaciones sugeridas en el Plan de Agua.
12. Solicitar al Ministerio del Interior promover y desarrollar políticas de participación ciudadana en el marco de la seguridad alimentaria.
13. Solicitar al Ministerio de Trabajo coordinar, estudiar e impulsar reformas a la normatividad vigente, para favorecer la participación laboral de la mujer, haciéndola mas compatible con el cuidado y crianza de los hijos.
14. Solicitar a las entidades ejecutoras del Plan Nacional de Alimentación y
Nutrición:
· Vincular a las Organizaciones no Gubernamentales para el desarrollo de actividades, seguimiento y evaluación de programas del PNAN.
· Vincular a los organismos internacionales, en la cofinanciación de programas y proyectos.
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(1) UNICEF, Estadísticas para Latinoamérica y el Caribe, mayo de 1996. Dentro de Latinoamérica se presentan grandes diferencias entre países: la prevalencia de la desnutrición global en Guatemala fue de 34% y en Ecuador del 17%, en Chile y en Costa Rica fue menor del 3%; por su parte, la desnutrición crónica alcanzó cifras de 58% en Guatemala, 37% en Ecuador, 10% en Chile y 8% en Costa Rica.
(2) INS, Investigación Nacional de Morbilidad 1965-1966. INS, Estudio Nacional de Salud 1977-1980. INS, Conocimientos, Actitudes y Prácticas en Salud: 1986-1989. PROFAMILIA, Estudio Nacional de Demografía y Salud 1995.
(3) PROFAMILIA. Estudio Nacional de Demografía y Salud 1995 (este estudio no incluye los nuevos departamentos).
(5) INS, Estudio Nacional de Salud 1977-1980. PROFAMILIA, Estudio Nacional de Demografía y Salud 1995. Según datos de UNICEF en 1993, el promedio para la región Latinoamericana y el Caribe fue de 38 por mil. La mayor tasa se registró en el Ecuador con 45 por mil y la menor en Chile y Cuba con 9 y 15 por mil respectivamente.
(6) PROFAMILIA, Estudio Nacional de Demografía y Salud 1995.
(7) Según estimación de línea de pobreza para 1993, el 53.6% de la población se encontraba por debajo de la línea de pobreza y el 20.5% por debajo de la línea de indigencia (DNP, El Salto Social 1994-1998).
(8) Sistema de Vigilancia Epidemiológica Alimentaria y Nutricional SISVAN, Minsalud, 1994.
(9) Minsalud, INS, UNICEF, Estudio Nacional de Desórdenes por Deficiencia de Yodo. Colombia. 1995. Según la OMS, cifras superiores al 5% indican problema de salud pública.
(10) Se considera que un 80% de la población consume por lo menos una vez por semana algún alimento vendido en la vía pública.
(11) A nivel nacional se cuenta con 510 organizaciones vinculadas al programa y 828 puntos de venta comunitarios.
(12) Red de Solidaridad Social. Documento CONPES 2722 DNP:UDS-Misión Social 1994.
(13) Algunos ejemplos son: a) el Plan de Acción de la comunas populares del municipio de Medellín, liderado por la alcaldía. Entre sus actividades están la conformación del comité de seguridad alimentaria, restaurantes escolares, complemento alimentario al anciano, cooperativas de producción de alimentos con mujeres cabeza de hogar. b)Proyecto de Mercadeo Social de Alimentos de Manizales, apoyado por la Universidad Católica del municipio, el cual busca estabilizar los precios de los alimentos; en el cuatrienio esperan llegar a 35 barrios de 5 comunas con mayor grado de inseguridad alimentaria.
(14) El Tiempo de los Niños. Documento CONPES 2787 Minsalud, ICBF-DNP:UDS-PAFI 1995.
(15) La norma del ICA estipula la adición de yodo en 100 partes por millón, entre otros minerales; además, la Resolución 2836 de 1994 establece la coloración.
(16) Presidencia de la República, Departamento Nacional de Planeación,Plan Nacional de Desarrollo, El Salto Social, Ley de Inversiones 1994-1998.
(17) Ley 50 de 1990 Reforma Laboral, Capítulo V Protección a la maternidad.
(18) Política de participación y equidad para la mujer. Documento CONPES 2726, agosto 30 de 1994