Durante esta jornada, se atendieron integralmente a 112 niñas y niños, y 22 madres gestantes, mediante acciones con enfoque diferencial, intercultural y comunitario que integran saberes ancestrales con prácticas de salud, alimentación y protección.
A lo largo de los encuentros celebrados desde 2023 hasta la fecha, se ha promovido la diversificación de la dieta con 420 raciones para preparar, recuperación de la cultura alimentaria (Festival del Maíz), huertas pedagógicas con la participación de 60 niñas y niños, y talleres de sensibilización sobre derechos, prevención de violencias y protección infantil.
La actividad refleja un proceso de empoderamiento de las mujeres indígenas para la toma de decisiones dentro de sus hogares y comunidad, y además reafirma el compromiso institucional de articular acciones que garanticen entornos seguros, inclusivos y protectores, especialmente para poblaciones vulnerables desplazadas y víctimas del conflicto armado.
«Cada semilla sembrada en comunidad es también una semilla de resistencia, memoria y dignidad. Con orgullo acompañamos este proceso para que la cultura embera, su identidad y su cuidado formen parte del presente en ciudad», afirmó la directora regional encargada, Íngrid Cubides Puentes.
El Bienestar Familiar reitera su voluntad de continuar este camino con la comunidad embera, tejiendo alianzas interinstitucionales, fortaleciendo el acompañamiento psicosocial, nutricional y cultural, y avanzando en acciones diferenciales de protección para la niñez indígena en contextos urbanos.